Ya no mejoro, ¿qué puedo hacer?
Muy buenas a todos, amantes de la suela gastada.
¿Cuántos de vosotros habéis mejorado en vuestras competiciones y entrenamientos los primeros meses pero luego os cuesta progresar o ya no lo hacéis?
Hay muchas variables que interfieren en el rendimiento, muchas no podemos controlarlas, pero hay otras que sí. Espero poder ayudaros teniendo en cuenta estos puntos báscios.
1. Analiza tu competición o entrenamiento
Céntrate en la competición o entrenamiento que deseas mejorar. Para evolucionar gran parte de tu volumen de entrenamiento debe focalizarse en la distancia y ritmo que quieres mejorar.
¡¡PERO OJO!! Si trabajamos siempre la misma distancia y al mismo ritmo llegará un punto en que el estímulo de trabajo no será suficientemente fuerte para generar mejoras en nuestro organismo. Así que tendremos que trabajar por encima y por debajo de estos parámetros (a grosso modo lo que llamamos entrenamiento polarizado).
2. Trabaja tu fuerza
Si somos capaces de transmitir más fuerza al suelo, iremos más rápido. Del mismo modo, si tenemos más fuerza pero vamos a la misma velocidad seremos más eficientes y nos fatigaremos menos.
3. Trabaja tu cadencia al correr
Las cadencias excesivamente lentas harán que tu cuerpo corra de una forma mucho más agresiva y tenga más boletos para lesionarse.
4. Mejora tu técnica de carrera
Con una técnica más apurada absorberás mejor el impacto. Tus articulaciones lo agradecerán y serás capaz de mejorar tu zancada para conseguir una mayor optimización de tu energía.
5. Varia tu entrenamiento
Si entrenas siempre igual, no mejora. Si sigues haciendo lo mismo no vas a obtener diferentes resultados.
6. Cuida cada aspecto de tu vida
Tener una dieta variada y equilibrada, dormir 7-8 horas, tomar ayudas ergogénicas (recuperadores) si las necesitas, aumentar las sesiones de fisioterapia, etc. Además de mejorar tu salud, te permitirá recuperarte mejor de cada entrenamiento para poder entrenar más y mejor, aunque cantidad no es sinónimo de mejora.
Mi recomendación es siempre contratar un entrenador o, por lo menos, deja que te asesore. Cada individuo es un mundo y lo que le vale a tu compañero puede que no te valga a ti. Cuantos más factores de nuestro entrenamiento podamos cuantificar, más precisos y controlados serán nuestros entrenamientos.
Como todo en la vida, rodearte de profesionales hará que mejores en lo personal, laboral o deportivo.
Joel Marmol, entrenador personal
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